24 diciembre 2013

Listo "El Monstruo Pelú"



Ya está listo "El Monstruo Pelú" mi más reciente stand-up comedy special. El show está disponible para download en video y también en audio formato MP3 así que visita www.carlosambert.com y descárgalo gratis.

Es mi regalo de Navidad para ustedes, que lo disfruten!

Gracias a todos los que hicieron posible este proyecto con sus contribuciones al crowdfunding via Indiegogo y a todos los que siguen por su trabajo y colaboración en "El Monstruo Pelú".

Dirección: Árvel Garay-Cruz
Dirección de Fotografía: Efraín Rosado-Mestre
Cámaras: Edgar Colón, Natanael Mora, Efraín Rosado-Mestre y Alexander Santiago en la cámara 'Behind the scenes'
Supervisión de Audio: Esteban Ruiz
Asistentes de Producción: Mylene Flores, Lela Rodríguez
Consultores Creativos: Marién Vélez, Josué Oquendo, Daniela Paola Romero
Post-Producción de Audio: Edgardo Cartagena
Color Corection: Eduardo Mariota
Música: “Pickeando”, Letra y música de Omar García

Producción Ejecutiva: Mylene Flores, Luis Torres, Luis Díaz, Chester Chung-Lo
Producción Asociada: María Ramos Pérez, Luis Mustafá, Lisa Flores, Gerardo Mujica, Marie & Arnaldo Torres, Namibia Viera

Agradecimientos a Liga Puertorriqueña de Improvisación Teatral-LIPIT, Eco-Mensajería, Luis Felipe Meléndez, Félix Díaz Vélez, Melissa Rodríguez, Janibeth Santiago, Javier del Valle, Alma Torres, Lidimarie Trujillo, Nelson Roldán, Juan Pablo Rivera, Amneris Nieves, Emilio Flecha, Jorge Nogueras, Erika Paola Montalvo, Griselia Cruz, Anayarí Fernández, Edwin Arroyo, Sam Garrick.

10 diciembre 2013

raspa y gana



Suerte para la lotería la verdad es que no tengo ninguna. Hay gente que sueña números o hace relaciones entre fechas importantes y el número que le toco en el turno del doctor en la cita médica de la mañana y alguna operación de matemática mística les da la combinación que los hace "pegarse" en la lotería legal o clandestina; pero yo he decidido no jugar porque no es lo mío.

En un 99% de las veces pierdo todo el dinero y el resto del tiempo al menos logro recuperar lo invertido y me retiro del juego. Hace un tiempo hay unos juegos conocidos como 'raspa y gana' con premios instantáneos y en estos juegos de un dólar tampoco me acompaña la suerte. Las veces que me gano algo es el mismo peso que jugué y termino cambiándolo por un Snickers y sigo mi camino.

La promesa del dinero fácil despierta las esperanzas del que necesita un par de pesos pero con mi suerte lo único que me motivaría a jugar más estas loterías de cartón serían premios más prácticos como surtido de alimentos por un año, viajes con gastos pagos o créditos en las facturas de los servicios más imortantes como el agua, la luz, la gasolina o la renta.

Por eso aquí le presento a la gente de la Lotería Electrónica de Puerto Rico, tres ideas de juegos y premios nuevos que de seguro motivarán a la mayoría de nosotros. "Dame más gasolina" con premios redimibles por combustible, "Paga lo que debes" con créditos para tu factura o pago del carro, agua, luz, teléfono y casa, y por último "Ráspate pa'l carajo", con unas vacaciones completamente pagas de resultar ganador.

Yo jugaría al menos cinco pesos semanales si estos fueran los premios, por aquello de que a cualquiera le toca...

03 diciembre 2013

no jangueo en la gasolinera




Uno de los indicativos de que la economía está cambiando es que la gente empieza a cambiar sus gustos y empieza a disfrutar cosas más baratas, por ejemplo alquien que bebía Heineken ahora bebe Medalla porque tiene menos calorías o ha descubierto el sabor del producto del patio.

Otra de las señales es el parking de Walmart en Caguas donde he visto venta de animales por el día y por la noche familias que montan sillas y en lo que unos van a comprar un galón de leche y vasos desechables otros cruzan la calle y vuelven con tres cajas de donas de Krispy Kreme, donde los esperan con música del carro sonando y una mesa pa' jugar dominó en lo que le dan muerte a los munchies. Es parte del desarrollo y el ajuste a la situación, hay que apoderarse de los lugares y transformar las cosas aunque sea un poco.

La carretera #1 en Caguas es otro de los lugares transformados, una zona comercial dónde antes el negocio principal era el alquiler de cuartos pa' la chingadera ahora es una mezcla de lo mismo y un poco de Piñones gracias a docenas de kioskos a orilla de la calle donde venden frituras y aunque sea peligroso estacionarse a comer al lado de la carretera arriesgo mi vida y los patrocino con frecuencia.

También las gasolineras son spots de jangueo hace unos años y estar abiertas 24 horas les ayuda a siempre tener clientes suficientes dentro y en los alrededores para considerar que hay algo pasando allí. En algunas hay carritos vendiendo comida tan cerca que deberían tener meseros en patines que te lleven la comida al carro mientras despachas combustible. Hay posters y banners como si entraras a un pub y las ventas parece que se dividen entre gasolina para carros y gasolina pa' gente, en algunos puestos tienen una nevera dedicada a cervezas artesanales y más variedad que muchas barras y restaurantes. A estos también los patrocino y a veces es culpa del maldito límite para compras con ATH. Yo no estoy en las de invertir todo el dinero en el carro, y yo también necesito algo en el tanque así que mitad al del carro y mitad al mío pero pa'l camino.

Aunque sea ilegal beber en el carro prefiero el riesgo a una multa antes que darme la fría al lao del puesto. Lo primero es que la mayoría de las veces hay más policías de los necesarios en estos sitios, es mucha seguridad para un lugar tan pequeño y eso aumenta las posibilidades de que alguna patrulla salga detrás de mí si me ven tambaleando un poco de camino al carro por tener más octanaje del necesario en el sistema según la ley. Tampoco me gusta pasar más tiempo del que tardo en echar gasolina porque según las películas de acción y las explicaciones más básicas que recuerdo de la clase de química, las gasolineras están entre los lugares con más alto potencial para explotar y volar en cantos pa'l carajo en cualquier momento, todo el tiempo. Yo no tengo instintos suicidas pero el treinta y cinco por ciento de los que están allí dándose el trago también han decidido fumarse un cigarrillo dentro del perímetro donde está prohibido fumar por razones obvias, así que lo mío es entrada y salida.

No importa cuántos avisos sobre seguridad se pongan en cada una de las bombas, tampoco falta el kamikaze que abre los cigarrillos que acaba de comprar, prende uno mientras llena el tanque de su vehículo que tiene el motor encendido y contesta una llamada telefónica, él es Pancho Cojones y va a hacer tres de las tres cosas prohibidas precisamente por la seguridad de todos. Lo bueno de que la economía esté así de mal es que los diez dólares que antes tardaban dos minutos y medio en llegar de la bomba al tanque ahora tardan cuarenta y cinco segundos y hay que ordeñar la manguera. Es peligroso ir a una gasolinera y si elimináramos todos los factores de riesgo de muerte en la experiencia de ir a echar gasolina todavía quedan los asaltos y el primero está anunciado en el cartel de los precios: 'Arriba las manos en lo que te ordeño el bolsillo'.

No jangueo en la gasolinera; es peligroso y deprimente.